Díaz quiere prorrogar los ERTES hasta finales de enero de 2021 y alarga su ‘prohibido despedir’
- Los expedientes pasarían a computar de cara a la prestación del paro
- Mantiene el encarecimiento del despido y dificulta las reestructuraciones
- Trabajo intenta contener el cese de 812.500 trabajadores aún en ERTES
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, está dispuesta a prolongar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTES) hasta finales de enero de 2021, según señalaron a Europa Press fuentes cercanas a la negociación. Así se ha puesto encima de la mesa en el encuentro que se ha mantenido este lunes entre el Gobierno, sindicatos y patronal, que se ha cerrado sin acuerdo y con discrepancias entre las partes y al que se dará continuidad este martes.
Según han señalado las mismas fuentes, en el último borrador se pone fin al contador a cero, lo que supone que los ERTES pasarían a computar de cara a la prestación del paro, pese a las reivindicaciones de las organizaciones sindicales. Por su parte, la patronal habría presionado para que se elimine el veto a despedir.
Gobierno, sindicatos y patronal se han emplazado durante el encuentro celebrado este lunes a llevar propuestas de exoneraciones en las próximas reuniones que tendrán lugar a lo largo de esta semana. El borrador que se ha debatido hoy proponía prorrogar automáticamente los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo hasta el 31 de diciembre de este año y limitar los de fuerza mayor a empresas de una serie de actividades económicas especialmente afectadas y a negocios que dependan de estas, al tiempo que mantener la prohibición de despedido objetivo por el Covid tras los Erte hasta final de año.
Díaz alarga su ‘prohibido despedir’
Por otra parte, la ministra alargará el encarecimiento del despido hasta el año 2021 para esquivar la oleada de despidos que prevén las empresas para este otoño. Díaz mantiene así lo que desde Unidas Podemos llamaron «prohibición del despido» para proteger a los trabajadores frente a las consecuencias del estado de alarma decretado por el Gobierno.
En concreto, el documento de Trabajo, al que ha tenido acceso EFE, establece que permanecerá vigente, hasta el 31 de diciembre de 2020, el artículo 2 del real decreto-ley 9/2020, de 27 de marzo. El precepto recoge que no se podrían «entender como justificativas de la extinción del contrato de trabajo ni del despido» causas relacionadas con la pandemia. El Ministerio intenta así contener el despido de cerca de 812.500 personas, que son las que aún están en situación de Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en España.
El Gobierno no puede prohibir el despido porque atenta contra la Constitución Española. El despido es libre en España, con su causa y su indemnización, así que lo que lo que hace esta maniobra es encarecer las indemnizaciones. Pasa de un objetivo, con 20 días por año, a improcedente, con 33 días por año. El empresario, además, tiene que devolver las ayudas de la Seguridad Social, lo que dificulta la supervevivencia de las empresas.
«La fecha está abierta, probablemente no sea la más adecuada y tengamos que transitar hacia un poquito más. Si es necesario continuar, vamos a acompañar a las empresas porque se ha demostrado que los Erte son un mecanismo muy eficaz», ha dicho Díaz durante una entrevista en TVE.
Por otra parte, Yolanda Díaz aseguró que la propuesta del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, de incentivar la vida laboral después de la edad legal de retiro «no es el camino correcto», porque entorpecería el rejuvenecimiento del mercado laboral español, «profundamente envejecido». Escrivá contestó que no comparte este diagnóstico. «Tendremos una caída clara de la población en edad de trabajar, eso es indiscutible. Y en lo que estamos trabajando es, en el medio plazo, en dar incentivos a las personas que quieran trabajar más allá de la edad legal de jubilación», apuntó el ministro Escrivá
Negociación de los Erte
La propuesta de Yolanda Díaz llega en plenas negociaciones para la prórroga de los Expedientes Temporales de Regulación de Empleo, que caducan el próximo 30 de septiembre. Su retraso ha puesto a las empresas al borde de despidos y reestructuraciones masivas por la falta de estrategia. Según apuntan varios especialistas consultados por elEconomista, la salvación de muchas de las compañías que aún se encuentran en esta situación pasa por concretar ya una herramienta de desescalada en estos Erte.
Este periódico se ha puesto en contacto con varios empresarios en esta situación, que coinciden en señalar la situación de incertidumbre a la que se enfrentan. Destacan que, sin saber con qué instrumentos cuentan para afrontar esta situación a partir del 30 de septiembre, no pueden decidir sobre el futuro de los empleados. «A día de hoy no sabemos lo que va a pasar el día 30, pero la semana que viene tenemos que tomar ya una decisión y lo tendremos que hacer, me temo, a ciegas. Estamos perdidos», apunta un empresario del sector de la restauración, con varios locales.
La ministra Yolanda Díaz ha mandado hoy «un mensaje de tranquilidad» a las empresas
La medida afecta a cerca de 812.500 trabajadores. A 31 de agosto había 663.656 asalariados en Erte de fuerza mayor (268.953 menos que a 31 de julio) y 148.782 en Ertes no de fuerza mayor (37.151 menos).
La ministra ha mandado hoy un mensaje de «tranquilidad» a las empresas, a las que ha asegurado que los Erte seguirán si es preciso y que los agentes sociales sabrán «calibrar muy bien» la fecha necesaria. «La mesa tripartita va a continuar, por tanto dejamos la puerta abierta a que el mecanismo, si es necesario, permanezca, y siempre manteniendo los Erte de rebrote», ha insistido la ministra.